Hay muchos motivos para visitar Brasil, pero adentrarse en su particular cultura del café es un verdadero aliciente para los adeptos de esta popular bebida. Es otro de los países sudamericanos que tiene una gran tradición cafetera y que ofrece una completa visión de todo el proceso, desde el cultivo hasta la elaboración del oro negro.

De hecho, Brasil es el mayor productor de café a nivel internacional. Se cultivan, sobre todo, las variedades Robusta y Arábica, dos de las variedades más consumidas en todo el mundo. Su producción representa un tercio del total de café que se cultiva en el planeta y llega a todos los países.

Como en los dos destinos anteriores, hay varias rutas cafeteras que recorren los principales puntos de producción de café. Estas se basan en las conocidas rutas enológicas, que permiten descubrir al mismo tiempo la tradición vinícola de la región. 

En el caso de Brasil estas rutas se han establecido y promocionado para ofrecer a los visitantes una alternativa al turismo de sol y playa. O, al menos, para proporcionar un complemento para que las vacaciones en Brasil permitan acercarse a la cultura del café y para comprender de una forma más profunda los procesos de cultivo y recolección. 

Las principales zonas cafetaleras de Brasil son Minas Gerais, Sao Paulo, Espírito Santo, Bahía, Paraná y Rondonia.

En la zona de Minas Gerais se encuentran los campos de café más extensos. Una de las haciendas que se ubican en esta zona es la plantación de Sertao. En ella se cultiva la variedad Arábica, una de las más consumidas en todo el mundo. 

Si optas por la zona de Alta Mogiana has de saber que se encuentra a unas cinco horas en coche desde Sao Paulo. El café que se cultiva allí ofrece un sabor más delicado y suave. El paisaje natural y verde te espera en Paraná. En esta zona los cafetales se mezclan con ríos y bosques que conforman unos paisajes cautivadores e inolvidables.

Estas son solo tres zonas cafeteras que ofrecen rutas para conocer los campos de cultivo y todo lo relacionado con la cultura del café. Son destinos que tienen muchas cosas por ver y descubrir, pero con lo que nos ofrecen estas rutas tematizadas podemos profundizar en nuestro conocimiento sobre el origen de una bebida que nos acompaña cada día, y que se ha convertido en el motor de todo el mundo.

Hay más países que han convertido la producción y el tratamiento del café en algo más que un negocio, con millones de familias que viven del café. Es más que una bebida y una fuente de ingresos: se ha convertido en un verdadero símbolo de la cultura de estas regiones del planeta.

A lo largo de varias generaciones, los habitantes de estos países han aprendido a trabajar el café para permitir que nosotros, a miles de kilómetros de ellos, podamos disfrutar de su aroma y sabor. Da igual si prefieres café en grano, café molido o café soluble. Todo ellos salen de estos cafetales y tú puedes acercarte a conocerlos durante tus vacaciones.